La atención de los niños a esta temprana edad es
momentánea, por ello a la hora de desarrollar una sesión de bebeteca, es muy
importante la temporalización. A lo sumo 20 minutos, a
partir de ahí el niño se cansa, se agita o se puede incomodar.
Como en ningún momento queremos que el niño
relacione el concepto de lectura-tensión, iremos introduciendo gradualmente las
historias. Y si observamos que el niño inquieta, terminaremos la lectura.
A la hora de escoger, en el mercado tenemos un
amplio abanico para elegir:
-Libros de tela, con texturas, colores llamativos,
desplegables, con sonidos, música.
Podemos disponer de cuentos que más adelante el niño
pueda manipular. Por ello los más indicados son los de cartón duro (ya
que el niño tenderá a llevárselo a la boca, le resultará más sencillo pasar las
hojas y manipularlo) ,con equinas
redondeadas(para evitar pequeños accidentes) y dibujos coloridos y
llamativos.
Para contar os recomiendo algunos consejos
apropiados para estas edades: