¡Hola hilanderos/as!
Qué
abandonados/as os tengo y qué ganas tenía de volver a veros.
Hoy os regalo unas lecturas
frescas, llenas de humor, imaginación, aprendizaje, denuncia y sobre todo
con mucho cuento.
Como siempre, os regalo un
cuento corto de cosecha propia, para que la boca se os vaya haciendo agua y los
ojos estén abiertos para disfrutar de la lectura. ¿Preparados?, ¿Listos? Pues
pelillos a la mar.
Había
una vez un marinero que se echó a la mar. Extendió las velas de su barco y a
navegar, navegar.
Cuentan que las olas acunaban su barco. Mientras, él sin saber, se convirtió en capitán de una cascara de nuez.
Con el canto de las sirenas, el marinero danzaba. Mientras la brisa marina, su ensortijado cabello acariciaba.
Un día el marinero se hizo mayor y hechizado por el mar, la vuelta a casa olvidó.
¡No desesperes marinerito! Algún día con suerte, la luz de un faro te guiará, y podrás regresar al calor de tu hogar.
Cuentan que las olas acunaban su barco. Mientras, él sin saber, se convirtió en capitán de una cascara de nuez.
Con el canto de las sirenas, el marinero danzaba. Mientras la brisa marina, su ensortijado cabello acariciaba.
Un día el marinero se hizo mayor y hechizado por el mar, la vuelta a casa olvidó.
¡No desesperes marinerito! Algún día con suerte, la luz de un faro te guiará, y podrás regresar al calor de tu hogar.
Reyes
Frigard
Don
caballito de mar
(Edit.
Kókinos, Erik Carle, ISBN: 978-84-92750-83-2)
Hay mil formas de aprender
cosas sobre la naturaleza, sorprendentes y emocionantes. El mundo submarino es
mágico y este emotivo cuento llega a nosotros, por medio de una cuidada
estructura y unas bellas ilustraciones.
Papá caballito de mar,
decide ayudar a mamá en el cuidado de sus huevos, llevándoselos en la bolsa de
su tripa. Inicia un viaje por el fondo del mar, conociendo a otros padres
cariñosos. El señor Kurtus que llevas a sus hijos en la cabeza, el señor
Tilapia dentro de su boca.
A lo largo del viaje Carle,
demuestra un cuidado esmerado en las imágenes y las palabras, que introducirá
al niño y al adulto en un mundo mágico bajo el mar.
Un cuento que se aleja de estereotipos
e introduce una paternidad responsable, compartida e intensa. Y es que los
biberones, cambios de pañales, baños…etc, no es solo propio de las madres.
Mar de sábanas
Dentro
del amalgama de mares, nos reencontramos con uno de mis autores infantiles
favoritos, ¿lo reconocéis?.
Pablo
Perez Antón o Pablo Albo, camuflado en esta historia bajo su nombre real, nos
relata una bella historia de uno de nuestros mares predilectos.
Mar de
sábanas, es una historia de seguridad, imaginación y rica literatura.
"Yo
soy el dueño de muchos mares (...) Pero el que más me gusta es mi mar
secreto".
Así arranca este corto
cuento, en el que un niño se siente seguro, pues domina a todos los seres que
viven en ese mar y no le producen miedo. Los monstruos son miedicas, las
pesadillas no le encuentran, hay tesoros y grandes aventuras.
En su mar de sábanas da
igual si se hace pipí, porque son las olas que le han mojado. Si no encuentra
su chupete, no importa, porque entre las sábanas llora cuando quiere.
Pero todo mar puede ser
peligroso, pero siempre, siempre hay una mano amiga que nos reconforta. Si
queréis saber más, perdeos en el mar de letras y disfrutar de sus ilustraciones
nocturnas y brillantes.
Un
topo en un mar de hierba
Que recomendaciones mas geniales para los peques, y que decir de "un barquito de cascara de nuez"...
ResponderEliminarYo también tengo muy presente mi infancia, y la echo mucho de menos... vivía tan bien... pero mientras la vives no sabes que es como las vacaciones... que se acaban...y no tengo muy claro yo que mis hijos sepan valorar todo lo que tienen y viven.... igual para valorarlo de verdad tienes que ser adulto y haberlo perdido en el camino... un besote!
Kabu ¡cuánta razón tienes.
EliminarCreo que cuando una persona ha tenido una infancia feliz, es un adulto estable y rico.
Seguro que tus hijos lo aprecian, porque tu se lo haces sentir. Un besote muy fuerte
Tus escritos son como un soplo de aire fresco en un mundo lleno de calor. Muchas gracias
ResponderEliminarAnónimo/a,
EliminarMuchas gracias. Vuestros comentarios me animan a seguir escribiendo. Un saludo y bienvenido/a